Nada en la mente creo, bien distante observo al mundo desenvolverse y veo como se desarrolla y se mueve con frágil agilidad, y poco participo, para que mentir.
Me siento en una silla en mi jardín, y miro mi entorno, la gente, los autos, los perros y los arboles. Tranquilidad y parsimonia es lo que reflejan los arboles, me gustaría ser uno, sinceramente, que pasen los días y los años, que llueva, que corra el viento y que jueguen los niños, todo en perfecta sincronización.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deje aquí su apreciación, que luego será respondida.